609. Edificio Oficinas Centrales CCSS, San Jose, Costa Rica


Querido Eugenio,

El otoño se enciende ante mi puerta
como un manso misterio
invocando cegantes lejanías.
Yo reconozco en él lo que no ha sido.

Es casi una pasión transfigurándose
en la móvil frontera de las cosas.
Es un vencido mar que baja al polvo.
En su dormida voz

se agita el tenso límite
de la piedra y la luz

El otoño nos deja la pureza,
nos salva del dolor por milagro.
Arde su luz en nuestra voz incierta
y vence sin herir, sin corromper,

transmutando los sueños
como un espejo de infinita calma
en donde nos miramos reflejados
en otra eternidad.

(Hacia otra Luz. Laureano Albán)

Un abrazo.
R

No comments:

Post a Comment